Hoy ha llegado un terapeuta nuevo, muy joven e inexperto, con ideas novedosas en la cabeza, el pobrecillo. No deberían traer doctores tan jóvenes, porque se les nota que están acojonados, y con razón. Este muchacho hace muy poco que es doctor, y nosotros hace ya muchos años que estamos locos. No puede competir. El terapeuta nuevo nos ha dicho que debíamos hacernos regalos.