Nos avergonzó mucho saber, estos días, que la contraseña que más usamos los seres humanos para resguardar nuestros correos es «123456».
Google ha lanzado esta semana Latitude, un servicio gratuito que permite ubicar —mediante el celular— a los contactos de la agenda que den su consentimiento. La noticia, que fue recibida con algarabía por los usuarios tecnológicos, no profundiza en la flamante problemática del matrimonio moderno.